El boom de reggae que vive la Argentina desde hace unos años puso un desafío en la carrera de Los Cafres: revalidar su título de referentes de este género en el país. Ellos fueron los encargados de dejar todo listo para Ziggy Marley en el escenario principal. Con una lista de temas muy similar a sus últimos shows, la banda de Guillermo Bonetto no se tuvo que esforzar mucho para que la gente se entusiasme con su propuesta que, a esta altura, suena un tanto repetida. Por último, luego del festejado set de Nonpalidece en uno de los escenarios secundarios (en toda la jornada no hubo un solo abucheo a ningún artista por parte de los 25 mil asistentes), Ziggy Marley se apropió del main stage para concluir la noche. Su mezcla de sonido roots con pizcas de dancehall, más los infaltables covers de Papá Bob, estuvieron a la altura de las circunstancias: dejaron a todos satisfechos. Eso sí: para la próxima, si el plan es traer a alguien con el apellido sagrado... ¡queremos a Damien Marley!
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